Cuando un proyecto de infraestructura pluvial implica el diseño de una estructura de captación (nos referimos al conjunto de un canal o caja recolectora y una rejilla) varias dudas nos acechan: ¿cómo iniciar el diseño? ¿con qué materiales? ¿de qué dimensiones? Todas estas dudas tienen una respuesta que abordaremos de forma breve:
¿Cómo iniciar el diseño? Se deben tener dos cuestiones claras: las cargas que debe soportar la rejilla (incluyendo su peso propio) y el área de entrada requerida (a fin de satisfacer una demanda de caudal estimada previamente). También se debe establecer si sobre la rejilla transitarán personas, bicicletas, personas en sillas de ruedas, montacargas o vehículos, para adaptar el diseño a dichas necesidades.
¿Con qué materiales? El material más común es el acero, y dependiendo de las demandas de carga se definirán los calibres, dimensiones y secciones apropiadas. Es importante no perder de vista que también deben revisarse las soldaduras para garantizar su durabilidad.
¿De qué dimensiones? Las medidas de una rejilla y de la estructura de captación dependen de varios factores, los más importantes serían: el área de entrada de la rejilla, las maniobras previstas para su habilitación (excavaciones, cimbras, colado, etc.) y su mantenimiento. Por lo anterior, una estructura suficientemente amplia parecería una buena opción, sin embargo -hablemos de la rejilla en particular- es preciso analizar que una estructura amplia incrementa su peso propio y eso la convierte en un elemento más difícil de maniobrar; por otra parte, una estructura sumamente amplia puede permitir el almacenamiento de una gran cantidad de azolves y basura, lo que dificultaría las maniobras de mantenimiento.
En las siguientes líneas presentamos algunas imágenes del estado de algunas rejillas metálicas fabricadas con los principales vicios que se deben evitar al proponer un diseño de esta naturaleza.
Por este motivo, es importante contar con toda la información posible para iniciar con el diseño de una estructura de captación; o -en su defecto- utilizar un canal prefabricado que ofrece - entre muchos otros- los siguientes beneficios:
Rejillas prefabricadas en una variedad de materiales y diseños (plástico, acero galvanizado, acero inoxidable, concreto polimérico y hierro dúctil).
Rejillas prefabricadas para distintas condiciones de carga (desde 1.5 toneladas hasta 90 toneladas).
Canales y rejillas de calidad homogénea, respaldadas por pruebas y normas que aseguran un adecuado desempeño.
Facilidad de instalación.
Posibilidad de configurar arreglos lineales de canales, rejillas, registros y otros accesorios.
Maniobras sencillas de mantenimiento.
Durabilidad.
En el próximo post expondremos los parámetros normativos relacionados con la capacidad de carga de las trincheras prefabricadas; por lo pronto dejaremos una infografía con las distintas condiciones de carga a considerar:
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