Los pozos de visita son estructuras que se utilizan en sistemas de drenaje (sanitario y pluvial) para interconectar las líneas de tubería y permitir su inspección y mantenimiento; también, se suelen utilizar bajo alguna de las siguientes situaciones:
Al inicio de una red de atarjeas (se suele conocer como pozo de visita cabecero o cabeza de atarjeas).
Cuando es necesario incrementar el diámetro de la tubería.
Si los niveles de arrastre de las tuberías concurrentes son distintos (también, es prudente evaluar si el desnivel entre arrastres amerita una estructura de caída, según los diámetros de las tuberías).
Cuando las tuberías que concurren al pozo se fabricaron con distintos materiales o pertenecen a distintos sistemas de medición.
Si es necesario realizar algún cambio de dirección (deben verificarse los diámetros de las tuberías que concurren al pozo para determinar la deflexión máxima permisible).
Retomando el asunto del monitoreo de las redes, en tramos continuos de gran longitud será importante colocar pozos intermedios para asegurar un adecuado mantenimiento. Las separaciones máximas sugeridas, según el diámetro de las tuberías, son:
Para diámetros hasta 61 cm (24”): 100 m.
Para diámetros mayores que 61 cm (24”) hasta 122 cm (48”): 125 m.
Para diámetros mayores que 122 cm (48”): 150 m.
La mayoría de los pozos de visita (prefabricados o habilitados en sitio) tienen una forma cilíndrica en la parte inferior y troncocónica en la parte superior; deben ser suficientemente amplios para permitir el paso de una persona y dejarle realizar maniobras en el interior. Para acceder al fondo de la estructura, el pozo de visita debe contar con escalones (fabricados a base de varilla, fierro fundido o polipropileno). El acceso desde la superficie se limita por medio de un brocal con tapa que se puede fabricar de distintos materiales según las necesidades de carga de la superficie; también, la tapa puede ser ciega o con ranuras.
Según la forma en que se fabrican, los pozos de visita se pueden dividir en pozos de visita prefabricados y pozos fabricados en sitio. En esta publicación abordaremos únicamente los pozos fabricados en obra, ya que los pozos prefabricados de concreto y registros pluviales Nyloplast® ya los hemos mencionado en anteriores publicaciones.
Usualmente, los pozos habilitados en sitio se fabrican con tabique recocido, concreto reforzado o mampostería, según la disponibilidad de materiales en la zona. Cuando se fabrican pozos para drenaje pluvial con tabique o mampostería se deben recubrir y pulir interiormente con mortero (cemento – arena), con un espesor mínimo de 1 cm. Si se fabrican pozos para alcantarillado sanitario, deben recubrirse en el interior y exterior con mortero combinado con impermeabilizante integral.
Dada la amplia variedad de diámetros de las tuberías (20 cm hasta 305 cm, aproximadamente) que pueden concurrir a un pozo de visita, se han dividido en:
POZO DE VISITA COMÚN
Este pozo de visita tiene un diámetro interior de 1.20 m; se fabrica cuando concurren tuberías de 20 cm a 61 cm de diámetro, y su profundidad mínima es de 1.00 m. Es el pozo de visita más versátil ya que suele utilizarse en las siguientes situaciones:
En la parte más alta de la red de atarjeas, se conoce como pozo cabecero o cabeza de atarjeas.
Como pozo intermedio, sin variar la dirección de la red de tuberías.
Para cambios de dirección a 90°
Cuando se tienen 2 entradas y 2 salidas a 90°
Si se tienen dos llegadas y una salida
También, se construye un pozo de visita común cuando se tienen tres llegadas y una sola salida
POZO DE VISITA ESPECIAL
Este tipo de pozos se utiliza cuando concurren tuberías desde 76 cm hasta 122 cm de diámetro, también se suelen emplear para cambios de dirección (deflexiones). Según las tuberías que concurren, se subdividen en:
Pozo de visita especial E1, con un diámetro interior de 1.50 m y una profundidad mínima de 1.50 m; es apropiado para tuberías de 76 cm hasta 107 cm.
Pozo de visita especial E2, debe tener un diámetro interior de 2.00 m y una profundidad mínima de 2.00 m; se utiliza cuando concurren tuberías de 122 cm.
Estos son los pozos de visita básicos que se utilizan en sistemas de drenaje; en posteriores entregas abordaremos otra modalidad de pozos de visita como los pozos caja, pozos especiales que se emplean en condiciones particulares y estructuras de caída, que se utilizan cuando los niveles de arrastre de las tuberías concurrentes superan las diferencias de profundidad permisibles. Si deseas asesoría a la hora de elegir el pozo de visita apropiado para tu proyecto o los beneficios que te ofrece uno u otro, puedes dejarnos un mensaje y nos comunicamos contigo en breve.